Es cierto que tengo cierta debilidad por la cocina tecnoemocional, por descubrir nuevas sensaciones gastronómicas. En casa siempre he disfrutado de platos tradicionales de gran nivel, ya que tanto mi abuela como mi madre son grandísimas cocineras, y quizás por ese motivo tiendo a lo “desconocido”.
No obstante, esto no quiere decir que no disfrute con una buena elaboración, por tradicional que sea. Un producto de calidad y bien tratado también consigue emocionarme, sin necesidad de estar cocinado con grandes técnicas avanzadas.
Este post, precisamente, está dedicado a un restaurante de cocina tradicional vasca al que no me resisto en cada visita a Euskadi. Situado en Orio, a unos 15 kilómetros de Donostia, el Asador Katxiña es una parada más que recomendable tanto para amantes de la carne como del pescado.
Así como digo que me apasiona lo desconocido en cocina, hay restaurantes en los que no puedo salir de los platos de siempre, y en Katxiña tengo un “menú propio” que solo varía mínimamente en función del número de comensales. Si vamos 4 o más, añadimos la suculenta txuleta de buey, pero si somos 2, dejamos la carne para otra ocasión para disfrutar del excepcional pescado que ofrecen.
De primero me encantan la tortilla de bacalao, jugosa y al punto de sal y cocción perfecto, y el revuelto de hongos, simple pero sabrosísimo.
Y de segundo y, a mi parecer, el plato estrella de Katxiña, el besugo, acabado de llegar de Tarifa. Ante él me quedo sin adjetivos. Hecho a la parrilla y aderezado con aceite, ajitos fritos y un toque muy agradable de vinagre, todo en su justa medida.
De postre, totalmente adictiva, la torrija con crema de arroz con leche. Solo de recordarla se me hace la boca agua. En mi ranking de torrijas se debate el primer puesto con la de Mugaritz.
Katxiña es una apuesta segura a precio razonable, con un servicio amable y atento, y un producto excepcional.
Asador Katxiña
Barrio San Martín s/n. Orio
Tlf. 943831407
www.katxina.com